Nuevas regulaciones de Web3 en Singapur: de flexibles a estrictas, las empresas enfrentan ajustes significativos
En 2025, la Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) lanzará un marco para Proveedores de Servicios de Token Digital (DTSP), lo que marca un cambio significativo en la estrategia regulatoria de Web3 del país. Esta medida requerirá que todas las empresas que ofrezcan servicios de activos digitales en Singapur obtengan una licencia, y solo estar registradas ya no será suficiente para llevar a cabo las actividades correspondientes.
Durante mucho tiempo, Singapur ha sido conocido como "el Delaware de Asia" debido a su entorno regulatorio flexible y políticas amigables para los negocios. Este entorno naturalmente ha atraído a numerosas empresas de Web3 a establecerse. Sin embargo, una serie de eventos recientes de alto perfil, como la quiebra de Terraform Labs y Three Arrows Capital, han expuesto las lagunas en el sistema regulatorio existente, lo que ha llevado a la MAS a reevaluar su estrategia regulatoria.
Los cambios clave en el marco DTSP radican en la ampliación del alcance regulatorio. Anteriormente, la Ley de Servicios de Pago (PSA) solo requería que las empresas que prestaban servicios a usuarios de Singapur obtuvieran una licencia. El nuevo marco abarcará a todas las empresas de activos digitales que tengan su base de operaciones en Singapur o que realicen negocios en Singapur, independientemente de la ubicación de sus usuarios. Esto significa que incluso las empresas que solo atiendan a clientes en el extranjero, siempre que operen en Singapur, deberán cumplir con las nuevas regulaciones.
MAS ha dejado claro que no otorgará licencias a empresas que carezcan de una base de negocio sustantiva. Esta política tiene como objetivo abordar el problema de las "empresas fantasma", es decir, empresas que están registradas como entidades en Singapur pero que realmente operan en el extranjero, aprovechando las lagunas regulatorias para evadir la supervisión. El nuevo marco exige que las empresas tengan capacidad operativa sustantiva, que incluye aspectos como la lucha contra el lavado de dinero, la financiación del terrorismo, la gestión de riesgos tecnológicos y el control interno.
Esta transformación plantea mayores exigencias para las empresas de Web3. Las compañías deben evaluar si sus actividades en Singapur están reguladas y si pueden mantener sus operaciones bajo el nuevo marco. Las empresas que no puedan cumplir con los nuevos estándares pueden necesitar ajustar su marco operativo o considerar trasladarse a otras jurisdicciones.
Sin embargo, las empresas que elijan migrar deben ser cautelosas. Otros lugares alternativos potenciales como Hong Kong, Abu Dhabi y Dubái también tienen requisitos de licencia para los servicios de criptomonedas que operan localmente. Por lo tanto, las empresas deben considerar la migración como una decisión estratégica y no como una simple evasión regulatoria, teniendo en cuenta la intensidad regulatoria, los métodos y los costos operativos.
La regulación más estricta en Singapur puede aumentar temporalmente las barreras de entrada al mercado, pero a largo plazo, esto ayudará a construir un ecosistema Web3 más robusto y confiable. La efectividad del nuevo marco dependerá de si estos cambios estructurales pueden implementarse de manera consistente y continua, así como de la interacción entre los reguladores y los participantes del mercado.
A pesar de los desafíos, Singapur sigue apoyando la innovación, pero al mismo tiempo exige a las empresas que asuman mayores responsabilidades y obligaciones de cumplimiento. Este equilibrio determinará si Singapur puede mantener su estatus como centro Web3 en Asia, al mismo tiempo que establece un ecosistema de activos digitales más maduro y sostenible.
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LonelyAnchorman
· hace9h
La tendencia inevitable de una regulación estricta
Singapur endurece la regulación de Web3, las empresas de activo digital enfrentan ajustes significativos.
Nuevas regulaciones de Web3 en Singapur: de flexibles a estrictas, las empresas enfrentan ajustes significativos
En 2025, la Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) lanzará un marco para Proveedores de Servicios de Token Digital (DTSP), lo que marca un cambio significativo en la estrategia regulatoria de Web3 del país. Esta medida requerirá que todas las empresas que ofrezcan servicios de activos digitales en Singapur obtengan una licencia, y solo estar registradas ya no será suficiente para llevar a cabo las actividades correspondientes.
Durante mucho tiempo, Singapur ha sido conocido como "el Delaware de Asia" debido a su entorno regulatorio flexible y políticas amigables para los negocios. Este entorno naturalmente ha atraído a numerosas empresas de Web3 a establecerse. Sin embargo, una serie de eventos recientes de alto perfil, como la quiebra de Terraform Labs y Three Arrows Capital, han expuesto las lagunas en el sistema regulatorio existente, lo que ha llevado a la MAS a reevaluar su estrategia regulatoria.
Los cambios clave en el marco DTSP radican en la ampliación del alcance regulatorio. Anteriormente, la Ley de Servicios de Pago (PSA) solo requería que las empresas que prestaban servicios a usuarios de Singapur obtuvieran una licencia. El nuevo marco abarcará a todas las empresas de activos digitales que tengan su base de operaciones en Singapur o que realicen negocios en Singapur, independientemente de la ubicación de sus usuarios. Esto significa que incluso las empresas que solo atiendan a clientes en el extranjero, siempre que operen en Singapur, deberán cumplir con las nuevas regulaciones.
MAS ha dejado claro que no otorgará licencias a empresas que carezcan de una base de negocio sustantiva. Esta política tiene como objetivo abordar el problema de las "empresas fantasma", es decir, empresas que están registradas como entidades en Singapur pero que realmente operan en el extranjero, aprovechando las lagunas regulatorias para evadir la supervisión. El nuevo marco exige que las empresas tengan capacidad operativa sustantiva, que incluye aspectos como la lucha contra el lavado de dinero, la financiación del terrorismo, la gestión de riesgos tecnológicos y el control interno.
Esta transformación plantea mayores exigencias para las empresas de Web3. Las compañías deben evaluar si sus actividades en Singapur están reguladas y si pueden mantener sus operaciones bajo el nuevo marco. Las empresas que no puedan cumplir con los nuevos estándares pueden necesitar ajustar su marco operativo o considerar trasladarse a otras jurisdicciones.
Sin embargo, las empresas que elijan migrar deben ser cautelosas. Otros lugares alternativos potenciales como Hong Kong, Abu Dhabi y Dubái también tienen requisitos de licencia para los servicios de criptomonedas que operan localmente. Por lo tanto, las empresas deben considerar la migración como una decisión estratégica y no como una simple evasión regulatoria, teniendo en cuenta la intensidad regulatoria, los métodos y los costos operativos.
La regulación más estricta en Singapur puede aumentar temporalmente las barreras de entrada al mercado, pero a largo plazo, esto ayudará a construir un ecosistema Web3 más robusto y confiable. La efectividad del nuevo marco dependerá de si estos cambios estructurales pueden implementarse de manera consistente y continua, así como de la interacción entre los reguladores y los participantes del mercado.
A pesar de los desafíos, Singapur sigue apoyando la innovación, pero al mismo tiempo exige a las empresas que asuman mayores responsabilidades y obligaciones de cumplimiento. Este equilibrio determinará si Singapur puede mantener su estatus como centro Web3 en Asia, al mismo tiempo que establece un ecosistema de activos digitales más maduro y sostenible.